Caliente un poco de manteca en una sartén y fría el pan hasta que dore; sáquelo y escúrralo en toallas de papel.
Fría en la misma manteca las almendras, los cacahuates y las semillas de ajonjolí. Saque y escurra.
Añada la manteca y fría el plátano; estílelo.
Muela cebollas, ajo y chiles chihuacles, pasillas y chipotles en una licuadora; agregue agua si lo requiere; reserve.
Triture el pan, las almendras, los cacahuates, el ajonjolí, el plátano y las semillas de los chiles, las hojas de aguacate, la pimienta gorda, negra, los tomates, las tortillas y el caldo suficiente para licuar los ingredientes. Cuele y deje a un lado.
Ponga la manteca restante en una sartén gruesa, saltee las cebollas en rebanadas y sáquelas.
Vierta la mezcla anterior y fría hasta que la grasa comience a salir a la superficie; agregue la molienda de los chiles; deje cocer.
Ponga sal y adicione el chocolate y el caldo necesario para que el mole tenga apariencia espesa.
Sirva la salsa de mole negro sobre pavo, pollo, cerdo o pichones, previamente cocinados.