Comida inglesa
La cocina inglesa tiene fama de no tener fama; se basa en platos propios tradicionales, como asados y pasteles dulces y salados. Pero lo que la caracteriza es la libertad de la que hace gala a la hora de incorporar exóticos platos de otros países.
La cocina británica no posee la elegante sencillez de la griega, ni es explosiva como la mexicana. Tampoco tiene el refinamiento de la cocina japonesa o tailandesa, ni la suavidad de la cocina italiana. Su encanto reside en otras cosas; por ejemplo, la isla de Inglaterra es la más abierta a influencias culinarias exteriores de todo el mundo.
Durante siglos estas islas han acogido infinidad de recetas y alimentos del exterior para incorporarlas a sus platos nativos. Como resultado, en ella se dan cita las más variadas tradiciones culinarias.
Ninguna otra capital del mundo puede igualar la variedad de estilos culinarios que Londres puede ofrecer: restaurantes africanos, americanos, caribeños, chinos, franceses, indios, italianos, japoneses, mexicanos, tailandeses y turcos y un largo etcétera.
El sandwich: descubrimiento universal
Respecto a la tradición gastronómica propia, el Reino Unido ha sido durante décadas muy criticado, tanto por los especialistas en el arte culinario, como por los ciudadanos de a pie. Con frecuencia se alude a su escasa variedad de platos -entre los que destacan el Yorkshire pudding y el rack de cordero– y a sus propuestas más bien rudimentarias.
Sin embargo, los británicos pueden presumir de haber sido los inventores del sandwich allá por el siglo XVIII. Comida universal donde las haya, el mérito de su descubrimiento recae concretamente en el Conde Sandwich, quien llegó a la conclusión de que lo mejor era colocar la rebanada de pan no sólo encima sino también debajo del jamón para que este no se cayese (y de paso evitar mancharse las manos). Para que el sandwich salga en su punto, que el pan esté tostado y crujiente y el queso bien derretido, se puede utilizar una sandwichera.
Carnes asadas
La cocina inglesa tradicional consiste sobre todo en carnes asadas (rosbif, corned beef, pato y platos de caza), acompañados de verduras, patatas y puré de verduras.
Es una de las bases sobre las que se asienta la comida inglesa, carnes excelentes preparadas del modo más sencillo posible: asadas. Eso sí, siempre acompañadas de las inevitables salsas, imprescindibles en la cocina británica.
El grousse es un ave, exclusiva de Yorkshire, similar a la perdiz al norte de Inglaterra y Escocia; se cocina asada en vino, tomillo, ajo y laurel y acompañado de verduras.
El crítico culinario Julio Camba ha llegado a decir de la cocina inglesa que “no existe como tal sino que sólo existen carnes maravillosas”, refiriéndose sobre todo al vacuno y al ovino.
Recetas con tradición
La crema inglesa es una receta del siglo XVIII, originaria del Trinity College de Cambridge, donde actualmente sigue siendo el postre más popular. Es una especie de natillas de yema de huevo y leche con azúcar, que actualmente se usa como base para los helados.
Asimismo, resulta inevitable hablar de los puddings de Navidad, de Yorkshire, de Verano etc. Además de los cake y pie (pastel), hechos con chocolate, queso, frutas o carne.
Otras comidas regionales incluyen el budín de Yorkshire (hecho con harina y agua) y la carne asada, el toad in the hole (salchichas en puré de patatas), y una sopa de carne o vegetales llamada cawl, que se come en Gales.
Renacimiento gastronómico
En cualquier caso, la cocina inglesa está sufriendo una renovación, consistente en un espectacular renacimiento del arte culinario, tanto en lo que respecta a los nuevos restaurantes que afloran, como en el concepto mismo de la elaboración de los platos. Atrás quedó la época inspiración estancada sin retoques ni mejoras de las recetas tradicionales.
En esta renovación se mezcla la fusión y un fuerte toque francés: La fusión es inevitable en el caso de Inglaterra si se tiene en cuenta la fuerte presencia oriental, africana y árabe. Todo como resultado de la gentil retribución los ex colonizados a su metrópoli; entre otros, hindúes, paquistaníes, indonesios, nigerianos, kenianos, etc.
El toque francés procede de la fuerte afluencia de geniales chefs y sommeliers galos. El resultado es que Londres se ha convertido en una verdadera meca de la cocina, un caleidoscopio de culturas que dejan constancia de su presencia también en el arte de la cocina. El resultado es que la reputación culinaria inglesa ha mejorado en gran medida en los últimos años.
>>> Recetas de cocina inglesa
Votación: Visitas totales:
24