
BOSSCHE BOLLEN (PETISÚS DE CHOCOLATE Y NATA)
Bossche bollen (petisús de chocolate y nata). Alimento Base: Chocolate, Calentar el agua con la mantequilla en una cazuela a fuego medio. Retirar del fuego cuando empiece a hervir. Añadir la harina y la sal y remover hasta que se forme una bola....
Tiempo de preparación 1 hora h 5 minutos min
Tiempo total 1 hora h 5 minutos min
Plato Chocolate
Cocina Holanda
Raciones 4 comensales
Ingredientes
- 75 ml de agua
- 30 gr. de mantequilla
- 45 gr. de harina
- Una pizca de sal
- 1 huevo
- 1 barra de chocolate puro
- 1 cucharada de agua
- 150 ml de nata
- 2 cucharadas de azúcar
Elaboración paso a paso
- Calentar el agua con la mantequilla en una cazuela a fuego medio.
- Retirar del fuego cuando empiece a hervir.
- Añadir la harina y la sal y remover hasta que se forme una bola.
- Dejar enfriar hasta que no queme al tocarlo.
- Añadir el huevo y seguir removiendo hasta que la masa lo absorba completamente y esté homogénea.
- Cubrir una fuente de hornear con papel sulfurado, dividir la masa en cuatro trozos (para bollen pequeños) o en dos (para bollen grandes), y ponerlos sobre el papel.
- Hornear a 200ºC/425ºF durante unos 20-25 minutos, o hasta que estén subidos y dorados. Dejar enfriar sobre una rejilla.
- Mientras se cuecen los bollen, montar la nata con el azúcar hasta que esté bien firme.
- Llenar con esta crema una manga pastelera de boquilla pequeña y rellenar los bollen por la base.
- Calentar la barra de chocolate con la cucharada de agua en el microondas (30 segundos a potencia media), remover hasta que el chocolate se haya disuelto y esté homogéneo.
- Dejar enfriar unos 5 minutos. Con mucho cuidado, sumergir la parte superior de cada Bossche bol en el chocolate fundido.
- Si no quieres mancharte las manos, coloca los bollen en una rejilla y vierte lentamente el chocolate fundido por encima, cucharada a cucharada.
- Dejar enfriar en la nevera durante unos 20 minutos, o hasta que el chocolate se haya endurecido y los pasteles estén firmes al tacto.
- Disfrútalos en compañía de una taza de café y unos buenos amigos. ¡Y no olvides las servilletas!